La salud dental durante la adolescencia presenta otro conjunto de desafíos. Para la mayoría de los padres, esto no es una gran sorpresa. Una cantidad vertiginosa de cambios se producen durante estos años de formación y los padres a menudo experimentan algunas frustraciones en el camino.
Pero los adolescentes escuchan más de lo que creemos, y molestar a los padres puede marcar una enorme diferencia en el futuro dental de estos jóvenes adultos. Los hábitos de cuidado bucal en casa tienden a decaer, a veces hasta el punto de descuidarse por completo. Una mayor independencia puede llevar a hábitos de comida y bebida que perjudican la salud bucal y general. No subestime ningún estímulo que le brinde a su hijo adolescente para ayudar a evitar los efectos a largo plazo de las caries y la inflamación de las encías.
Las visitas preventivas cada seis meses nos brindan la oportunidad de asesorar a su hijo adolescente y reforzar los esfuerzos que está haciendo con él. A veces, la relación que establecemos en un entorno profesional, pero a la vez amistoso, resulta especialmente eficaz. Además, podemos compartir los problemas con ellos mediante recursos visuales y reforzar los esfuerzos positivos que están haciendo.